30/julio/14.-Con el fin de conmemorar los 203 años de la muerte del Padre de la Patria, la noche de este miércoles se llevó a cabo la escenificación del fusilamiento del Padre de la Patria, Don Miguel Hidalgo y Costilla, que se llevó a cabo en el patio central del Palacio de Gobierno.
Previamente autoridades del gobierno del estado, del municipio y militares realizaron una guardia de honor en el lugar preciso del fusilamiento, el Altar de la Patria.
La escenificación se realizó las 20:00 horas en donde se dieron cita cientos de ciudadanos, con el fin de disfrutar de la ya tradicional representación de los últimos momentos de Miguel Hidalgo.
La escenificación se viene presentando desde tiempo del gobernador del Estado, Patricio Martínez García, quien solicitó representar este hecho histórico, bajo la dirección de Ignacio Medrano.
En el Patio Central del Palacio de Gobierno se instaló la gradería, sillería y un escenario en donde se tuvo la escenificación por parte de un grupo de actores locales, quienes representaron los últimos momentos de vida del Padre de la Patria.
Los actores son Jesús Ramírez fue Miguel Hidalgo, Melchor Guaspe, Pedro Codina ; Miguel Ortega, Humberto Holguín ; Ignacio Allende Jair García; Juan Aldama, Jorge Hinojosa; Mariano Abasolo, José Guzman ; Abella , Oswaldo Ronquillo; Teniente, Cheche Rodríguez; Manuel Salcedo, Miguel Serna; Frayle, Omar Salas; Josefa Ortiz de Domínguez, Georgina Ayub; José María Morelos, Juan Carlos Núñez; Escribano, Antonio Ramirez; Prelados, Manuel Alcantara, Gabriel Calleros y René David y Mariano Hidalgo es Antonio Ramírez. Bajo la dirección y adaptación de Holda Ramirez.
Antes de que llegase el momento de ser ejecutado, Hidalgo se confesó con el sacerdote Juan José Baca y comulgó, por lo que quedó libre toda excomunión. Cuando llegó la hora del fusilamiento, pidió que no le vendaran los ojos ni le dispararan por la espalda (como era la usanza al fusilar a los traidores).
Pidió que le dispararan a su mano derecha, que puso sobre el corazón. Hubo necesidad de dos descargas de fusilería y el tiro de gracia para acabar con su vida, tras lo cual un comandante tarahumara, de apellido Salcedo, le cortó la cabeza de un solo tajo con un machete, para recibir una bonificación de veinte pesos. Miguel Hidalgo murió el 30 de julio de 1811 fusilado por las fuerzas realistas.
Miguel Hidalgo y Costilla fue fusilado al amanecer, sentado en un banco, con la mano en el corazón, los ojos vendados y un crucifijo en el patio del antiguo Colegio de los Jesuitas en Chihuahua, entonces habilitado como cuartel y cárcel y que en la actualidad es el Palacio de Gobierno de Chihuahua.
A pesar de haber recibido dos descargas del pelotón, no murió; por lo que el teniente al mando ordenó a dos de los soldados disparar a quemarropa sobre el corazón del padre Hidalgo, acabando así con su existencia.
Su cadáver fue posteriormente decapitado y su cuerpo enterrado en la capilla de San Antonio del templo de San Francisco de Asís en la misma ciudad de Chihuahua; su cabeza fue enviada a Guanajuato y colocada en la Alhóndiga de Granaditas, junto a las de Allende, Aldama y Jiménez.
En 1821 fue exhumado su cuerpo de Chihuahua y junto con su cabeza se le enterró en el Altar de los Reyes, de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México. Finalmente, desde 1925 reposa en el Ángel de la Independencia, en la capital. En 1868 fue erigido en su honor el Estado de Hidalgo.