25/octubre/16.-Rafael Cruz, Alberto Peña y Francisco Zúñiga, tres arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), compartieron sus experiencias al haber trabajado y convivido con uno de los personajes más importantes para la arqueología en Chihuahua: la doctora Jane Holden Kelley, cuya labor en el Proyecto Arqueológico Chihuahua (PAC) dio como resultado el aporte más importante para la arqueología en el estado desde los trabajos realizados por Charles Di Peso, quien hace más de 50 años hizo las primeras excavaciones en Paquimé.
En la mesa de reflexión Los aportes arqueológicos de Jane H. Kelley y Paquimé, los tres expositores analizaron las trece temporadas de trabajo de campo en la parte centro-oeste del estado de Chihuahua, pero además, de manera sensible y entrañable compartieron sus experiencias personales y el valioso aprendizaje que a cada uno de ellos dejó el haber trabajado con la doctora Kelley.
“Jane Kelley nació en el estado de Texas en 1928 y falleció el 23 de abril de este año, por lo que esta mesa es un homenaje póstumo, tanto a su trabajo como a su persona”, comento Francisco Zúñiga, quien habló de cada una de las temporadas de trabajo dentro del PAC que la doctora realizó a lo largo de 20 años a partir de 1990.
Compartió con los asistentes una lista que Jane Kelley personalmente le entregó poco antes de fallecer, un documento que registra las fechas y los lugares de los campamentos en donde se realizaron las excavaciones, así como las personas que colaboraron en cada temporada dentro de este proyecto. Entre visitantes y colaboradores, mexicanos y extranjeros, fueron un total de 193 personas involucradas en el PAC, destacando la presencia de Gloria Fenner como visitante durante la última temporada en 2010, quien trabajó durante las primeras excavaciones con Charles Di Peso en Paquimé.
Comentó el arqueólogo Zúñiga que uno de los aspectos más destacados y novedosos en este proyecto fue el uso del georadar, un elemento tecnológico con el que se hace un barrido de la superficie del terreno para interpretar los datos por medio de computadora y saber si hay estructuras arqueológicas en el subsuelo y a que profundidad están. “Antes no se tenía esta tecnología, y se comprobó que mediante su uso se podía ahorrar tiempo y mano de obra”, dijo.
Con el PAC se registraron alrededor de 370 sitios arqueológicos en la zona centro-oeste del estado de Chihuahua, y aunque no todos fueron excavados, se obtuvieron muestras, temporalidad y otros datos importantes para el estudio de la arqueología en el estado.
Por su parte, Alberto Peña habló de lo que él llamó un “privilegio distinto” en su experiencia de trabajo con la doctora Kelley, ya que aunque no tuvo la oportunidad de participar directamente en el PAC, se relacionó con la arqueóloga de otras maneras: visitó sus excavaciones en Chihuahua y fue el encargado de traducir del inglés al español uno de los artículos más importantes para la historia de la arqueología en Chihuahua.
Publicado originalmente en la revista Canadian Journal of Archeology, este artículo hace una síntesis de 20 años de trabajo continuo en el PAC. La traducción hecha por el arqueólogo Alberto Peña, fue publicada por el INAH Chihuahua en diciembre de 2015 y presentada en un evento al que asistió la doctora Kelley.
Por último, el arqueólogo Rafael Cruz detalló el aspecto personal de Jane Kelley en cuanto a su calidad como investigadora pero también como ser humano, expresando con nostalgia que en esta plática hablaba por primera vez de la doctora sin estar ella presente. Habló de singulares anécdotas que vivió junto a ella y a su equipo de trabajo desde la primera temporada del PAC, en 1990.
Esta mesa de reflexión se llevó a cabo en el III Festival en las Casas Grandes, evento que se realizó durante los días 19, 20 y 21 de octubre en las instalaciones del Centro Cultural Paquimé del municipio de Casas Grandes.