27/julio/13.-El pasado jueves presentaron el libro “Bandoleros y Rebeldes” de Reidezel Mendoza Soriano en Casa Chihuahua ante cientos de personas.
En la panel se encontraba María Isabel Sen Venero, Carlos Alberto Fernández Baca, Rubén Mejía Valdés y Reidezel Mendoza Soriano.
El libro consta de dos tomos.En el primer tomo, el libro documenta las actividades delictivas de los bandidos norteños más significativos de los estados de Sinaloa, Durango y Chihuahua, entre 1874 y 1911, tales como: Heraclio Bernal, Francisco Villa, Ignacio Parra, José Beltrán, Tomás Urbina, entre otros.
“El primer tomo busca reflexionar sobre las posibles causas que orillaron a estos individuos a lanzarse a los caminos y convertirse en forajidos y cuatreros; según sus acciones, definir qué tipo de bandidaje practicaron, cómo operaron y analizar además las razones que empujaron a miembros de este sector a abanderar causas políticas y sociales de manera posterior o a la par de sus actos vandálicos”, comenta el autor al respecto.
Y en la parte dos , el segundo tomo que se presentará la noche de este jueves nos cuenta la historia de un oscuro personaje que cambiaba de nombre y de vida con frecuencia; que era mejor conocido por sus apodos que por su nombre de pila: el “gorra gacha”, la “fierona”, el “güero”, el “nalgas de fierro”; que desaparecía por largas temporadas y cambiaba constantemente de oficio.
La historia de un bandido que robó a los hacendados pero nunca los confrontó; que mató rurales pero no quiso combatirlos; que hurtó a los ricos pero pocas veces fue con la idea de repartir el botín entre los pobres, a quienes también desvalijó. Un bandolero que creó una red de complicidades a la que impuso sus propias normas, de las cuales la más importante era: la palabra de un compadre, de un compinche, de un favorecido se honra, jamás se traiciona; que acostumbraba a cambiarse tantas veces de nombre como de sombrero: Matías Parra, Alfredo Villa, José Beltrán, Alberto Rodríguez, Rayo Sauceda, entre muchos otros. De un bandido que no amanecía en el mismo lugar y que jamás confiaba en nadie, ni siquiera en su sombra. La historia de un bandido que se unió a un movimiento armado que apenas comprendía en busca de redención e indulto; de un forajido que recorrió las veredas y caminos de los estados de Chihuahua y Durango, su nombre: Doroteo Arango, alias “Francisco Villa”.
Reidezel Mendoza es Licenciado y Maestro en Historia por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ). Autor de Cazadores de la Sierra. Historia militar de la revolución en Chihuahua, con el que tuvo el “Premio Chihuahua 2009” en el campo de las Ciencias Sociales. Autor del libro Jinetes Rebeldes, publicado en 2010 por Gobierno del Estado de Chihuahua. Con la obra Rifleros de San Andrés, ganó el “Premio de Ensayo Histórico de la Revolución en Chihuahua 2010” que fue publicado por el Instituto Chihuahuense de la Cultura en julio de 2011, así como el libro Guillermo Baca Ronquillo, comerciante, maderista y revolucionario, publicado en 2012.
Ha participado como conferencista en diversos foros y seminarios regionales y nacionales de historia con temáticas de la Revolución Mexicana y bandolerismo en el Norte de México. Actualmente labora en el Archivo Histórico de la Arqudiócesis de Chihuahua.