Vivencias y Personajes de Ávalos

Recopilación de las notas más relevantes del Periódico Impreso Tercera Edad que circuló por mas de 20 años

 

Vivencias y Personajes de Ávalos

*El Templo de San José Obrero de corte europeo, de ladrillo rojo y marcos de cantera

*El día del Santo Patrono, se organizaba la Feria. Venían “gringos” de Alaska y Nueva York

*Se acuerda de “El Buzo”, aquel autobús color rata, feo, rechinador y “ahumador”

Por: Alejandro Pérez de los Santos

(Segunda Parte)

 

Periódico Tercera Edad del año 2003

Al día siguiente, a reportear. Era fácil. El sindicato en sus secciones Diez y Ciento Veintiocho, el Hospital, la Clínica, la Comisaría, la Delegación de Tránsito, las oficinas de la planta, la Parroquia, las cooperativas de mercancías y de transporte, y párele de contar.

Reviví amistades e hice nuevas. Allí estaban José Cordero, un líder muy aguerrido, Don Carlos Viramontes el “Tala”, Rosa Méndez, don Quirino Cisneros y Quirino chico; los Alvídrez, los Moya, los Ledesma, los Pérez ( de varias familias); don Pedro Martínez y su vástago cucurucho”; Baldomero Hernández y sus papás, los Paz, con José “el Trucutú” a la cabeza; “el Fideo”, “Chalú” Oaxaca, su hermano y Lolita, su hermanita, los Valenzuela, Don Juan, Hilario Peba y Katuta; los Ibarra, los Aguilar, Don Eugenio y sus hijos; los Trevizo, (EIda era una hermosa muñequita), los López, Don Juan, Doña Eva, Nico “La Payasa”, Cata y Mague, má Emilia, que pereció siendo ya señorita; los Venzor, los Bailón, los Loya; con “el Gallo” todo un gran futbolista a la cabeza, los Alvarez hijos de don Mauro, los Carranza, “El Cimarrón”, Don Francisco Araujo, “El Palomo” célebre por sus diabluras y Nicasio; los Castañón, (varias familias, entre ellas la de Conrado, que fue el boxeador Olímpico); los Salas, contando a “el Cuervo”; don Cuco Solís, que era el vigilante de las viviendas; otros Pérez, hijos de Don Manuel y doña Luz, “Canilla”, “El Chuluco”, “Pinglis” y “el Paquín” y su hermana Carmelita, los Ortega, don Manuel, Felipe, José, Chuyo, los Ojinaga, el Maestro, su señora y Olga y Velia, unas chiquillas preciosas, los Alfaro, Don Leopoldo, que murió muy joven, don Arturo y don David, más sus hijas y sobrinas, todas, pero especialmente Lila era una rorra, los Lara, con Licha bonita como ella sola, los Zarate, los Campolla, los Méndez, Manuelito vive y lo veo con frecuencia en su trabajo que es de jardinero en Villa Juárez, los Soto, Don Eufemio, Domingo, Fermin, los Barraza, los Jáquez, el “Conscripto” que fue verdadera estrella del béisbol, se encuentra en silla de ruedas, él fue a los Centroamericanos a Venezuela, los Martínez, “Chito” e Isaac, el primero fue astro de los peloteros de la Liga Mexicana y de la Liga del Pacífico, los Jaime, Luis, que Se fue a Chicago, Salvador, Javier y Esthercita, los Rivas, con Memo, mi amigo de la Infancia, los Mora, los Sígala,don Fernando convalece de una vieja dolencia, los Pina, los Gómez, don Mariano, Mariano Chico y Rodolfo, los Ruelas, los Topete, los Espinoza, Don Jerónimo Ortega y su esposa Chelo, “El Muerto”, “Carne chica”los Cisneros, hijos de don Benjamín, “El Mascarillo”, Chagua y Belemcita, una casó con “Pima”, el “Nata”, don Ricardo, el vendedor de nieve, “El Nacional” que vendía diarios, “El Terraceño”, “el Matarique”, Ché Viviano, La “Sota” Venegas, Chano Venegas, “el Encantado”, los Olague, Nacho fue dirigente sindical y Carolina, al quedar viuda abrió un negocito de publicaciones, los Lom, sus padres murieron Joaquín y Samuel son dos hombres de bien y se dedican al Comercio, los Peñalosa, don Marcos, Leonor y varias otras muchachitas, los Esparza, don Jesús andaba en silla de ruedas, su madre Doña Lupita y Josefina, muy guapa, asistían al señor cura; los Prieto, los Esquivel, los Millán, los Saldívar, los Villa, José, que apodaban “el Cala” es un gran amigo que estimo mucho; los Rivera, los Terrazas, los Laine, tantos y tantos más.

En el mercado estaban los comercios de don Aurelio Ovalle y sus hijos, Toto entre ellos, de Doña Cervulita, cuyo esposo, Don Ambrosio Esquivel pereció dejándole a ella ser padre y madre, la botica de Locha Mariscal, la peluquería de don Isidro Durán y su hijo Ernesto, el Correo, aparte en un despacho pegado a la barda entre el hotel chico y la Escuela Industrial, don Fernando Díaz, su esposa y sus hijos Elena y Juan más la “Chatita” que era su cuñada, nuevamente en el mercado, La Carpa Azul, de un señor Don Pancho, la tienda de Rubén Rodríguez, la tienda y carnicería de José Sud y Serafina; la tienda de don Heraclio Beltrán, la tienda de los De Santiago, Don-Cruz Casas, que hacía unos pastelillos como nadie en el mundo, los puesto de verduras de Doña Hermila, Margarita y sus hijos Blas, Cheché y sus numerosas hermanitas, de don Luis Fernández, el padre de “Quelo” y de “Chile Chipotle”, el puesto de don Manuel Fernández. Había gasolineras, na de Don Teodosio y otra de un señor Gómez.

En el Cine Ávalos, que se anunciaba con un cartel enorme en la cuadra diecisiete, donde fue la tienda de raya estaba Chuelino y la señorita Lechuga, había dos sitios de “Taxis” el 61 y el 96.

El transporte era eficiente, circulaban las “manchurias”, vehículos propiedad de Don Alfredo Madrid, para el movimiento de los trabajadores, que era manejada por Manuelito, Chonito, otro señor cuyo nombre no recuerdo, “el Remache” y el “Monito”. Eran unos camiones hechizos, de madera, pintados de amarillo.

También se podían viajar en «El Buzo”, un autobús color gris rata, feo, rechinador y que iba dejando a su paso humo.

Entre ellos mucha gente viajaba, dando tumbos, ya por el camino de Robinson o por lo que hoy es el Boulevard Fuentes Mares.

La parroquia o templo de San José Obrero, es del más elegante corte europeo, todo de ladrillo rojo, puertas con marcos de cantera, piso exterior de cemento gris, techos con tableta y refuerzos de pino canadiense, cubiertos de teja americana, su piso es de madera, paredes revestidas de yeso, presbiterio de mármol, sagrario de bronce, pila bautismal de granito, todo lo cual hace un conjunto elegante que combinaba con sus -Ventanales de emplomados preciosos, que representan a los doce apóstoles.

Vitrales que en el sol naciente o en el ocaso lanzan al interior una férica cascada de luces de todos los colores.

Un señor San José fino y hermoso que semeja marfil es el titular.

Cada año, para el día del Santo Patrono se realiza la fiesta, entonces vendedores de alimentos, suvenires , etc. Se sitúan en el atrio, que es circundando por una barda de trabajo por su ladrillera y cada año también vienen infinidad de antiguos pobladores de la localidad, algunos desde tierras tan lejanas como Alaska, Nueva York, Colorado, etc. Los gringos católicos o no que un día se fueron.

Las torres gemelas siguen llamando a misa los domingos y el recinto suele colmarse de gente de Villa Juárez o las que queden en Ávalos. Estos campanarios esbeltos, graciosos tienen campanas de resonar melodioso.

Fue construido como en 1945, inaugurado y bendecido por el Señor Obispo Don Antonio Guisar Valencia y su primer párroco fue el padre Vicente Cizauskas, un sacerdote muy querido que le gustaba ver a los jóvenes bailar y divertirse y hacer deporte.

Precisamente el templo fue realizado con colectas, tardeadas, encuentros deportivos, loterías, venta de infinidad de cosas y, desde luego el granóte de arena que aportó la compañía minera.