Para un Gran Actor y Cantante

Recopilación de las notas más relevantes del Periódico Impreso Tercera Edad que circuló por mas de 20 años.

 

Miguel Aceves Mejía  (  edición año 2005 )

“Para un Gran Actor y Cantante”

Por: Librado Reza Barrio

Allá por los años 40’s cuando empezó a hacer pininos en el canto conocido y muy apreciado Miguel Acevez Mejía, me tocó conocerlo aquí en mi barrio de Santa Rosa; en aquel tiempo vivía con su mamá en la calle 10a. Casi esquina con la 20 de Noviembre. El se desempeñaba como mecánico y al salir de su trabajo de vez en cuando le gustaba ir a jugar billar a un salón que se encontraba cerca de su casa, que en aquel tiempo se llamaba “El Cañón de Bachimba”. Otras veces era contratado por los dueños de salas de espectáculos y centros sociales, ya que era poseedor de una gran voz y un inigualable falsete, cualidad que se le reconoció como el rey del falsete.

Al poco tiempo lo perdí de vista, pero en cierta ocasión me fui una temporada a Tijuana BC. Al llegar renté un apartamento y me llamó la curiosidad algunos papeles que se encontraban sobre el escritorio y me di cuenta que pertenecían a Él, donde lo contrataban de algunos centros sociales y salas de espectáculos, ya que tuvo una gran aceptación en aquella frontera, y en el papel más reciente le notificaban de la Cd. de México para hacer algunas grabaciones y ya estando allá se sucedieron una tras otras adquiriendo tal popularidad que logró colocarse entre los mejores actores y exponentes de la canción Mexicana.

Enseguida veamos una bella tonada que le dedica un gran escritor y poeta.

 

“TONADA PARA MIGUEL ACEVES MEJIA”
Por: Ramón Olvera Cobos

Andas Juntado caminos,
para caminar la noche.
Trovas, desbrozando espinas
para que duerman los nombres,
vas en todos los horarios
y en huella de los hombres:
los oscuros o pequeños,
los tristes y sollozantes,
a los que llevan la luna
por los senderos errantes.

Parveando en las madrugadas
Vas despertando a las calles
Y tus pasos son el eco
y el amor de una guitarra.

Eres pasión que se eleva
En el agua de una estrella,
En un violín sueña tu alma
tejiendo risas y penas.

En las yemas de un huapango
y en el oían de un falsete
cazas la ilusión del viento
y el temblor de las mujeres.

“Rogaciano el huapanguero”
te convidó sus cantares
y “El siete leguas” te dio
sus relinchos y lamentos
su pólvora y sus andares.
“Carabinas treinta, treinta”
con las balas alumbrando,
en ti fueron hospedando
y el grito puro del llanto
que anunciaba la tormenta.
Aurora de las vigüelas
con José Alfredo hilvanando
una canción o un fracaso
o la herida de una ausencia.

O junto a Tomás trovando
la decepción que se asoma
en una “Negra paloma”
que engaña y sigue volando.

A Rubén Fuentes llegando
Por un cielo alto y azul,
diciendo “La noche y tú”
y con el pecho sangrando.
Ojos de “La malagueña”
en las cejas de un lucero;
“Flor Silvestre” allá en el campo
descalza y buscando el canto
del nopal y los jilgueros.
Los mariachis desgranando
en las semillas del alma
con sus sinfonías trovando
y eterno Silvestre Vargas.

Ancha tierra de Chihuahua,
primer celaje del mundo;
Ventura Romero, el agua,
el trigo, el amor, Susana,
el “Madrigal” de los besos,
“La burrita” anda, que anda,
la montaña y el desierto.
Vives junto a los caminos
y los trojes musicales,
Eres canción, fuego, trino,
sollozo, terrón, campana,
ventanal, espera, grito,
acorde del viento, dicha,
dolor de un sueño lejano.
Puedes cantar los olvidos
y también los madrigales.