04/Mayo/13.-Durante su juicio Allende se portó muy educado, pero al ver que el juez lo trataba con desprecio, rompió las esposas que tría en las manos y con el pedazo de cadena que colgaba le dio un fuerte golpe en la cabeza. Así fue sentenciado a muerte y fusilado el 26 de junio de 1811, en la escenificación del “El Juicio de Ignacio Allende” presentado la noche de ayer en Casa Chihuahua.
Se llevo a cabo la “La Noche de los Insurgentes” ante cientos de personas escenificando al juicio de Ignacio, dirigido por Ernesto Medina.
Bajo el guion de Carlos Fernández Baca los actores, Jesús Ramírez, Miguel Hernández, Ernesto Medina, Lic Escobedo, Adolfo Salais, Oswaldo Ronquillo, Rafael Bracho, Pedro Armendáriz, Francisco Salcido y Javier Chavira.
En marzo de 1811 los caudillos de la Independencia fueron capturados, por una traición de Ignacio Elizondo, en Acatita de Baján. Allende fue el único que opuso resistencia y luchó hasta el final. Los prisioneros fueron conducidos a Chihuahua, donde se les incomunicó y procesó. Durante su juicio, Allende se portó muy educado, pero al ver que el juez lo trataba con desprecio, rompió las cadenas que traía en las manos y con el pedazo de estas que colgaba, le dio un fuerte golpe en la cabeza al juez Abella. Una vez juzgado, fue sentenciado a muerte y fusilado el 26 de junio de 1811, su cadáver después fue decapitado y sepultado en el panteón de San Felipe (hoy Parque Abraham González) junto con sus compañeros. Sus restos hoy en día reposan en la cripta de la Columna de la Independencia, en la ciudad de México.